lunes, octubre 06, 2008

Aprender menos para vivir más


Cuanto más “tontas” son las moscas más tiempo viven, afirma un laboratorio suizo que defiende la hipótesis de que una mayor actividad del cerebro se paga en términos de energía vital. A esta conclusión han llegado los profesores del departamento de ecología y evolución de la universidad de Lausana (Suiza) Tadeusz Kawecki et Joep Burger, al descubrir “una correlación negativa entre una mejora de las capacidades de aprendizaje de la mosca y su longevidad”.
Los investigadores, que publican los resultados de su estudio en la revista Evolución, dividieron en dos grupos una población de moscas provenientes de la región de Bâle. Dejaron uno de los grupos como estaba, y a las integrantes del otro les enseñaron a asociar el olor de un alimento con un sabor, agradable o no, o también a relacionar un impacto percibido en el laboratorio con un olor determinado. Al cabo de 30 o 40 generaciones, los científicos produjeron moscas que aprenden mejor y memorizan durante más tiempo. Pero el experimento mostró que el primer grupo de moscas, las que no habían seguido ningún aprendizaje, vivían más tiempo que las otras (una media de 50 o 60 días). “Dicho de otra manera, cuanto más inteligente se vuelve la mosca, menos tiempo vive”, afirman los científicos, que suponen que el envejecimiento de los bichitos se acelera debido a una actividad neuronal que provoca daños. “Esto explicaría por qué las moscas, como la mayoría de los demás animales, apenas han desarrollado sus capacidades neuronales”, señalan.
Según este estudio, si tenemos en cuenta que el cerebro consume de 20 a 25% de la energía de los seres vivos, podemos deducir que los animales dotados de un cerebro menos activo viven más tiempo.

1 comentario:

Anónimo dijo...

mi olvidara conocimientos previamente adquiridos

interesante la nota, pero suena como una apologia al vago xd